Desde hace unos años realizo la felicitación navideña para ados consulting, todo un lujo y un reto que cada año cojo con ilusión e intención de hacer algo mejor que el año anterior.
Una de las características de la felicitación es no caer en los tópicos navideños ni motivos religiosos que ya están tan utilizados que pierden su significado.
Con la sensación de desilusión imperante que veía en el entorno quería encontrar algo que supusiera un motivo de animo para el nuevo año, de esperanza y fuerza para empezar con buen pie.
La niña comentaba que un abrazo podía ser un buen modo de reflejar esas sensaciones y desde luego nos servía para separarnos de la imagen excesivamente comercial que se le da a estas fechas, de regalos, comilonas y demás y llegar a un acto íntimo, tan barato y a la vez tan caro de conseguir en ocasiones pero que dado de corazón no deja a nadie indiferente.
3 comentarios:
PRECIOSO!!! Qué poderosos son los abrazos dados de verdad!! Cuánto bien hacen!!! Y lo mejor es cuando salen sin pedirlos.
Un abrazo inmenso para ti y muchisimas gracias!!
Esta genial!! Felicidades!!
¡Ya lo creo, qué razón tienes!
Me acojo a tu idea y te envío un abrazo virtual, que no es lo mismo; pero la intención y el cariño sí.
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